El turismo de observación de aves es una actividad de esparcimiento que crece a paso acelerado, tanto en el resto del mundo como a nivel local.
Se trata de una de las ramas del ecoturismo en mayor armonía con la naturaleza, pudiendo ser realizada en casi cualquier rincón de la tierra por lo que también es una actividad inclusiva y apta para todo público.
En Aves Argentinas somos conscientes de que el turismo de observación de aves tiene un gran potencial como herramienta de conservación, brindando una alternativa sustentable a las actividades tradicionales que en general no contemplan la conservación de los ambientes y sus aves. La Argentina actualmente recibe cada año a miles de entusiastas observadores de aves y amantes de la naturaleza que nos visitan de todo el mundo para conocer nuestras especies y paisajes increíbles. Además, cada año más y más personas en nuestro país se vuelcan a la actividad y viajan en su tiempo libre a diversos rincones de nuestra geografía, visitando sitios que muchas veces están fuera de los recorridos turísticos convencionales. Todo esto ayuda al conocimiento de nuestro patrimonio natural por parte de la población (algo fundamental teniendo en cuenta que conocer es el primer paso para conservar) y brinda una alternativa económica que tiempo atrás hubiera sido impensada.
No obstante todo esto, el turismo de observación de aves tiene aún mucho por crecer en el país. En ese marco, a fines del año 2013 Aves Argentinas firmó un convenio tripartito junto con el Ministerio de Turismo de Nación y la Administración de Parques Nacionales, para el desarrollo del Turismo de Observación de Aves en Argentina. Desde el año 2014 hemos estado realizando acciones con el objetivo de preparar el terreno para que nuestro país pueda posicionarse dentro de los principales destinos de observación de aves en el mundo, y de esa manera generar más recursos que ayuden a la conservación de la naturaleza y sus aves. Para ello continuaremos trabajando en diferentes puntos del país con el afán de identificar necesidades prioritarias y sentar las bases de un proceso que esperamos pueda continuarse más allá de los tiempos del convenio, para lograr desarrollar todo el potencial con el que cuenta la Argentina y su privilegiado patrimonio natural y ornitológico.
