Las aves migratorias trascienden fronteras, conectan comunidades y establecen un nexo invisible entre ecosistemas. La conservación de estas viajeras incansables es fundamental para preservar los majestuosos ambientes en los que ellas y nosotros dependemos mutuamente.
Estas especies son indicadoras de la buena salud de los ambientes que visitan, como los humedales. Mientras tengamos la presencia de estas aves tan sensibles en esos ecosistemas, es porque esos sitios están en un buen estado de conservación.
Estas aves están amenazadas por el cambio climático, que altera los sitios que visitan, y actividades humanas, como la falta de ordenamiento territorial (usos de la tierra para explotación agrícola o turismo mal planificado), tendidos eléctricos o iluminación nocturna que las desorienta en sus viajes.
Desde Aves Argentinas trabajamos para conservar sitios que son claves para las aves migratorias, ya que son uno de los grupos de aves más vulnerables a nivel global. Además, trabajamos en acciones de educación ambiental para favorecer la convivencia con las distintas especies.